Grandes espacios de entretenimiento, ahora megacentros de vacunación

El Dodger Stadium y Disneyland pasaron de ser lugares de diversión a espacios donde miles reciben la vacuna contra la COVID-19.
Standing in front of Sleeping Beauty Castle at Disneyland Park, Mickey Mouse, Minnie Mouse and their pals welcome visitors from all over the world. Combining classic favorites and exciting additions, the Disneyland Resort is an essential part of a Southern California vacation. (Joshua Sudock/Disneyland Resort)

California.- Pensar en el Dodger Stadium o que tal en el lugar más feliz del mundo, Disneyland, donde lo que brindaban era placer y felicidad… esas emociones están lejos de lo que eran.

Hoy forman parte del surrealismo que se vive debido a la pandemia.

Esos enormes espacios como el estadio de los Dodger y el mágico mundo de Disneyland donde los sueños se convierten en realidad, son los espacios que les brinda la esperanza de sobrevivencia a la pandemia de la COVID-19.

Ahora, como se ha visto en películas bélicas, se han convertido en lugares emergentes para hacer pruebas masivas de detección de coronavirus, como lo fue el estadio de los Dodger y que ahora junto con Disneyland, son para inocular a miles de personas.

El Dodger Stadium y Disneyland son los lugares más grandes del Sur de California, donde por los próximos días estarán vacunando a millones de personas que forman parte del primer grupo que deben recibir la vacuna contra la covid-19.

California es el estado más poblado de Estados Unidos, que aunque tardó seis meses para llegar a los 10,000 fallecimientos por la COVID-19 y que en un mes llegó a los 20,000 y de ahí a los 30,000.

El Dodger Stadium estuvo por varios meses, sirviendo como un centro de pruebas de la COVID-19, en donde miles de personas llegaban en sus autos. Ahora con esa misma técnica, llegan pero para ser inyectados.

Todos los días recibirán a aproximadamente 12.000 personas, una ambiciosa meta que piensan cumplir en el que probablemente será uno de los sitios de vacunación más grandes del país.

Sin embargo, las autoridades enfrentan otro dilema: la lenta distribución de vacunas y un tsunami de llamadas pidiendo una cita, a tal punto que los sistemas de las diversas opciones para obtener un horario se han caído.

Y esto se debe a que como las personas mayores de 65 años o más ahora son elegibles para la vacuna, ya están solicitando sus citas pero en el condado de Los Ángeles, no pueden atenderlos porque aún no terminan de vacunar los más 500,000 trabajadores de la industria de la salud y de hogares de ancianos.

Los funcionarios esperan comenzar a vacunar a este otro grupo de adultos mayores a principios de febrero, junto con los maestros y trabajadores del cuidado infantil, los servicios de emergencia, la alimentación y la agricultura.

— No te pierdas