El ser profesional y responsable trajo a la vida de Jesús Gael Magaña Jantes un proyecto que le quitaría tiempo y dinero pero que a la vez le daría fuerza para avanzar con sus metas.

Un joven guanajuatense de 21 años, estudiante de la carrera de arquitectura tomó la valiente decisión de emprender en terreno conocido, así nació Ebanista Studio, una pequeña empresa de carpintería operada por él, su hermano y su sobrino.

“Yo siempre me he dedicado a este rubro de la carpintería, siendo estudiante de bachillerato, cuando entré a la universidad aún colaboraba con un carpintero, pero no me gustaba como hacía las cosas él”, recordó Jesús Gael.

Al no sentirse pleno en ese trabajo buscó tener su propio proyecto pero que éste pudiera ofrecer a la gente muebles de baño, cocinas integrales, y otros mobiliarios de melamina, madera, enchapados a precio justo. Ahora necesitaría convencer a su familia para arrancar con su deseo.

“Les comenté a mis hermanos y me apoyaron en poder tomar un préstamo con mucho esfuerzo, confiaron en mí, en que yo sabía lo que hacía”, señaló.

Jesús Gael realizó sus primeras piezas para vender a través de redes sociales, buscaba darse a conocer y hacerse de capital. Hizo una página en Facebook y así consiguió a su primer cliente.

“Yo recuerdo que llené mi casa de material, el patio, es más en todos los lugares teníamos muebles, en mi cuarto, así ganamos mucha experiencia”, perpetuó.

Sin embargo, el comprador tenía muchas dudas e incertidumbre, no confiaba en una página, razón por la que Jesús Gael lo invitó a conocer su área de trabajo y hasta toda su familia, así logró generar confianza y hacerse de su primer contrato que le traería estabilidad económica, pues era amueblar toda una casa, cocina, clósets, cava de vino, puertas, etcétera.

“Lo que nos diferencia a nosotros es que no vemos al cliente como una moneda, ni como un signo de precio, el cliente es cliente tenga o no tenga dinero, nuestro servicio será igual para todos, me gustaría inculcar eso”, contó.

El objetivo de este joven es deja un granito de arena con un excelente servicio, calidad y amabilidad al precio justo para cada uno de sus clientes, por eso Jesús Gael Magaña Jantes es Imparable.

“Nada de esto es imposible si te lo propones, ha sido complicado, pero si tienes el apoyo de la familia y buena fe, así como un buen corazón la gente te lo agradece”, finalizó.