La aprobación federal para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales (una reforma que entrará en vigor hasta 2027) ha generado preocupación en el sector del autotransporte en Guanajuato.

De acuerdo con la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (CANACAR), este cambio podría representar importantes ajustes operativos, pues la dinámica de los operadores no se rige por un horario convencional, sino por tiempos de ruta, descanso y traslados prolongados.

El vicepresidente de CANACAR Bajío, Jaime Almanza, explicó que actualmente los operadores trabajan alrededor de ocho horas al día y luego descansan, pero advirtió que la reforma obligará a reorganizar los tiempos de operación.

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Señaló que podría ser necesario contratar a más operadores y considerar el pago de horas extra, lo que incrementaría los costos. “Tendríamos que ir adaptando los tiempos y analizar si será necesario contratar más operadores y evaluar cómo impactará en los costos”, comentó.

Almanza también señaló que en países desarrollados ya se manejan jornadas de este tipo, por lo que México deberá estudiar esas mejores prácticas para determinar cómo implementarlas de forma eficiente.

Enfatizó que el reto será encontrar un equilibrio que permita cumplir con la nueva normativa sin comprometer el nivel de servicio y la competitividad del transporte de carga, una actividad clave para la economía del Bajío.