El reporte informó que las personas están preocupadas por su bienestar financiero, social y el de sus familias. Dicen que no han podido cubrir los gastos habituales, como el alquiler, la hipoteca, los servicios públicos o las facturas de las tarjetas de crédito.
Asimismo, muchos no están seguros de tener las habilidades y los conocimientos adecuados para conseguir un trabajo de buena calidad en la próxima década.
De los 37 países de la OCDE, México es el que mayor aumento porcentual mostró en estos dos tópicos mentales, sin embargo, todos mostraron un incremento. Estados Unidos pasó de 8.2% a 30.8% en los niveles de ansiedad, y la depresión de 6.6% a 23.5%.
Y el menos afectado fue Japón, con una tasa de 10.9% que se conservó y de depresión de 7.9 a 17.3%.
El 44% de los hogares informaron tener al menos un miembro esta sin empleo por la crisis o por la pérdida del empleo, un despido, un plan de retención, reducción de las horas de trabajo, licencia sin goce de sueldo e inclusive una renuncia.