De acuerdo a los analistas del Centro de Estudios Económicos del Sector Privado (CEESP), el Objetivo de la Cumbre del CEO Dialogue, tuvo entre sus objetivos “apuntalar” la confianza de inversionistas nacionales y extranjeros en México como destino para invertir.

Señala la IP, que en la reunión se anunciaron compromisos de inversión que, aunque algunos ya se habían participado con antelación, es deseable que se puedan cumplir en los primeros meses de esta administración.

Admite que hubo avances, pero considera que la pregunta fundamental es: ¿a reunión de alto nivel fue suficiente para elevar los niveles de certidumbre que se han paralizado desde las elecciones presidenciales para asegurar que la inversión fluirá sin contratiempos en el corto y mediano plazo?.

Sostiene que, incluso, las expectativas de crecimiento de la economía se siguen corrigiendo a la baja; y el más reciente ajuste lo anunció el Fondo Monetario Internacional (FMI), quien anticipa que en 2024 la economía mexicana crecerá 1.5%, siete décimas por debajo de su previsión previa, pero “para 2025 el ajuste marcó una baja de un avance de 1.6% a uno de 1.3%”.

Para el CEESP, la moneda está en el aire pues persisten los antecedentes de la preocupación de los hombres de empresa nacionales y de los EU, mismo que se remontan a la siguiente realidad:

• Quizá la variable más sensible en este contexto ha sido el tipo de cambio, a partir del proceso electoral fue aumentando el nerviosismo que ha propiciado que desde ese proceso hasta ahora muestre una depreciación de 17%; es decir, casi tres pesos por arriba de su cotización un día antes de las elecciones, para ubicarse en 19.83 pesos por dólar.
• El cambio de gobierno por las propuestas de reformas constitucionales, lo que llevaba implícita la sobrerrepresentación del Congreso.
• La Bolsa de Valores, refleja los niveles de incertidumbre. Si bien a partir del día de las elecciones el índice bursátil ha mostrado altibajos: su comportamiento muestra una tendencia a la baja. Desde las elecciones presidenciales hasta el cierre de la semana pasada, el indicador bursátil acumula una pérdida de 4.0%.
• El posible endurecimiento de la postura de Estados Unidos en la renegociación del T-MEC.
• Cómo funcionará la economía con un sistema judicial dominado por el partido en el poder, carente de organismo autónomos como contrapesos.
• La carencia de un estado de derecho sin reglas claras que permita fortalecer la confianza, ante esto la inversión seguirá siendo menor a lo que requiere el país.
• Los signos de esta menor certidumbre han sido claros a través de la evolución de los principales indicadores económicos.
• Otra incidencia: las relaciones comerciales con otros países, donde resalta el tema de la pausa de la relación de México con Estados Unidos.
• En los resultados del INEGI, destaca que en los primeros nueve meses del año el indicador de confianza empresarial del sector construcción acumuló una caída de 3.4 puntos, mientras que el del sector manufacturero disminuyó 2.6 puntos y el del sector comercio 5.0 puntos.
• Aumenta el nerviosismo el posible endurecimiento de la postura de los EU en la renegociación del T-MEC, independientemente de quien gane las próximas elecciones en ese país.

Recuerda el CEESP en su Análisis Económico Ejecutivo, que los indicadores de confianza empresarial comenzaron a deteriorarse desde principios del presente año 2024, posiblemente ante la expectativa de los resultados de la contienda electoral y, posteriormente, a las diversas propuestas de reformas constitucionales que se anunciaron.

Reconoce el sector empresarial nacional, que el atractivo de invertir en México es significativamente alto, en especial por el interés de diversos países para participar en el proceso de relocalización, pero aún no se han concretado todos aquellos anuncios de inversión que se tienen identificados.

Incluso, ejemplificó: como ya se mencionó, en la reciente Cumbre de Alto Nivel entre líderes y empresarios de México y Estados Unidos, se anunciaron proyectos que significan una inversión de 20 mil millones de dólares.

Además, agrega que recientemente la Secretaría de Economía informó que, en sus actividades de monitoreo del 1 de enero al 30 de junio del presente año, el sector privado hizo 143 anuncios de inversión con una expectativa de 45,464 millones de dólares (md), lo que se suma a los 110 mil 744 md reportados durante 2023.

No obstante, precisa que “hasta ahora no se han visto materializados estos montos de inversión, seguramente por la cautela que persiste entre los inversionistas”.

Acerca del nerviosismo sobre cómo funcionará la economía con un sistema judicial dominado por el partido en el poder, carente de los organismos autónomos que se encargaban de establecer las políticas públicas necesarias para que la actividad productiva funcione más eficientemente en temas como regulación y transparencia, entre otros relevantes, “está aumentando y sin contrapesos efectivos será complicado fortalecer el atractivo de invertir en el país”.

Finalmente, el CEESP, envía mensaje al nuevo gobierno: su responsabilidad radica en crear un ambiente idóneo en el que predomine el estado de derecho, reglas claras del juego para todos los participantes y se fortalezca la confianza para quienes desean invertir en la actividad productiva de México.

Y advierte: mientras no haya resultados claros y palpables al respecto, los niveles de inversión seguirán siendo menores que lo que se requiere para lograr tasas de crecimiento elevadas y sostenidas.