Este domingo el Club Rotario celebró su Festival de la Paella, una tradición de 35 años en León, pero una tradición con causa.

El presidente del Club Rotario Jorge Carlos Obregón explicó que con los recaudado en esta jornada se apoya a instituciones de beneficencia.

Socios del Club Rotario montaron desde la mañana sus estaciones paelleras para recaudar los fondos que serán repartidos entre las instituciones de ayuda a mujeres, drogadictos y albergues infantiles.

Uno de los más entusiastas paelleros es Eduardo Castro, vicepresidente del Club Rotario el año pasado, cuando se repartieron unos 3 mil órdenes de paella entre comensales y para llevar, y se recaudaron alrededor de 700 mil pesos para donaciones

“Todo lo que se genera aquí, incluso la comida, todo lo que los paelleros aportamos es de nuestra bolsa y de varios patrocinadores, por ejemplo el del arroz, y así tenemos varios patrocinadores para poder ofrecer y todo lo que se recauda, todo es para beneficencia pública”.

Miguel Díaz de Cosío preparó durante dos horas una cazuela enorme de paella que tardó hasta 50 minutos en cocerse.

“Es una paella muy tradicional, es una receta que me impartieron en mi familia, mi abuelo es español. Ingredientes: pollo, costillitas de cerdo, conejo, mejillones, almeja, camarón, calamar, aros de calamar; va la parte del arroz: es arroz bomba lo que se usa para hacer la paella tradicional, llevamos el colorante, normalmente lo ponen mucho aquí en México, pero allá se usa mucho la paprika como un colorante natural, aparte da sabor; entonces usamos mucha paprika. Y no podemos perder el indiscutible azafrán porque si no, no estamos en un evento de paellas, caray”.

Al final, los comensales se fueron con la barriga llena y el corazón contento.

“Está súper rico, muy rico y con muy buena variedad”, comentó Rocío Alcocer, comensal que probó distintas variedades de paella en compañía de su familia.