En peces como tilapia y carpa que habitan en la Laguna de Yuriria, se han encontrado pedazos de plástico en su organismo que podrían desarrollar en las personas que los consumen asma o cáncer de pulmón.

Se han evidenciado posibles riesgos a la salud física en seres humanos, que consumen estos peces y que se podrían traducir en la aparición de padecimientos como la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica

Ante el incremento desmedido en la generación de residuos plásticos, la egresada de la Maestría en Ciencias Biológicas de la Universidad de Guanajuato, Diana Amezcua, develó la presencia de microplásticos en diversas especies que habitan los cuerpos de agua de la Laguna de Yuriria y con ello, refrendó la importancia de incorporar acciones que favorezcan el cuidado, así como la preservación del medio ambiente y sus recursos naturales.

En peces como la tilapia y la carpa, mismos que son de consumo habitual entre los pobladores de la región, se han llegado a encontrar especies con 4.2 unidades y en casos aislados, hasta con 30 unidades de microplástico en su organismo; las dimensiones de los microplásticos van desde 1 micra a 5 milímetros, lo equivalente al tamaño de un grano de sal refinada.

Las actividades de investigación y análisis que permitieron mostrar dicha información se llevan a cabo en Laboratorio de Ecología de la Sede Noria Alta de la División de Ciencias Naturales y Exactas del Campus Guanajuato.

La Bióloga explicó que todavía no se ha verificado al cien por ciento en humanos el daño a la salud de quienes consumen este tipo de peces, pero sí en animales y se ha podido determinar que estos microplásticos pueden causar obstrucciones en sus vías respiratorias o se les crea una falsa sensación de saciedad o algunos peces nacen con deformidades: añadió hay algunos artículos relacionados con personas que respiran estos microplásticos y curiosamente desarrollaron asma o cáncer de pulmón, tan solo como dato curioso, dijo a la semana consumen de plástico lo equivalente a una tarjeta bancaria.