Se acabó la mística de conquistar el Everest
Aquel episodio épico de Edmund Hillary al conquistar la cima del Everest en mayo de 1953 se congeló en el tiempo.
Hillary y el Sherpa Tenzing Norgay, hicieron cumbre en la que fue la novena expedición británica al techo del mundo.
Por delante de ellos, ni un alma y atrás, tampoco.
Subieron hace 68 años un gigante de nieves cristalinas y trayectos limpios.
Elsa Ávila, la primera alpinista mexicana en conquistar la cumbre del Everest lo hizo en 1999, apenas a tiempo, antes de que la hazaña se convirtiera en un lugar común.
El 19 de mayo de 2012, hicieron cumbre 234 personas. Cuatro murieron
Hoy la mística con la que muchos alpinistas incluso dejaron la vida en el ascenso, ha desaparecido; la basura ganó la partida.
Agencias de viajes lo ponen todo: Al mismo pie de la pared, se pueden conseguir mapas, tiendas, alimentos, oxígeno y toda clase de pertrechos.
Según reporte de National Geographic, el auge de las expediciones comerciales en los últimos 20 años ha acabado con las nieves cristalinas.
Los trayectos, son verdaderos basureros, que en ocasiones, no permiten ni sacarse la selfie.