Las rivalidades de Rafael Nadal con Roger Federer y Novak Djokovic marcaron una época en el tenis que con el retiro del español quedarán solo en la historia.

Nadal-Federer es denominada la rivalidad del siglo, siendo el español vencedor con 24 victorias de 40 juegos que disputaron desde 2004, cuando el nacido en Mallorca, España, de entonces 17 años, batió al entonces número 1 mundial, cinco años mayor.

Nadal le arrebató la cima a Roger Federer el 18 de agosto de 2008 y terminó con las 237 semanas del suizo como número uno del mundo en el tenis varonil.

Con Novak Djokovic surgió otra rivalidad que salió incluso de las pistas con las declaraciones desafortunadas del serbio en constantes ocasiones sobre Nadal, pero que el español logró darle un revés con categoría.

El manacorí le ganó su primer US Open al serbio en 2010, después de cuatro sets, y a quien a la larga se convertiría en el máximo ganador de títulos Grand Slam en la rama varonil, con 24.

El último partido que disputaron juntos fue la Segunda Ronda de los Juegos Olímpicos de París 2024, el partido número 60 entre el serbio y el español.

Nadal no pudo despedirse como en sus días más gloriosos. No era ese joven que a los 19 años ganó su primer título de Roland Garros. La actitud no era la misma, como si fuera un tenista debutante que busca su lugar en el mundo.

Djokovic domina por poco la rivalidad entre ambos, de 60 partidos donde se enfrentaron el serbio ganó 31 y Nadal 29.

El único sobreviviente del denominado Big 3 en las pistas es el serbio, con 37 años y cerca del centenar de títulos, cifra que solo rebasó Roger Federer, quien llegó a 103, Nadal se adjudicó 92, a falta de la Copa Davis que se disputará el próximo mes.

El trío se enfrentó 49 veces en total entre el Abierto de Australia, Roland Garros, Wimbledon y el Abierto de Estados Unidos, incluidas 23 finales.

Entre esas finales se encuentran la épica de Wimbledon 2008 entre Nadal y Federer, que terminó en la oscuridad, y la Final del Abierto de Australia 2012 entre Nadal y Djokovic, que es una de las más largas de la historia de un Major, con cinco horas y 53 minutos.

El fin de la rivalidad entre los tres grandes se hará oficial al final de la temporada con el retiro de Nadal el próximo mes.