Ciclismo de ruta y descensos a 130 k/h
El ciclismo de ruta se caracteriza por ser el único deporte al que no hay que acudir; él viene a ti.
Antes de la pandemia, era clásico ver las montañas atiborradas de gente, lo mismo en Francia que en Italia o España.
Todo ello se modificó y ya suena a historia.
En México, también se vivieron épocas históricas; la primera tal vez la de las Vueltas del General García Valseca y, después de 1970 a 90.
Había recepciones multitudinarias, prácticamente en todos los lugares que tocaba la caravana ciclista.
La región del Bajío era una de las más entusiastas, pues contaba con un buen número de pedalistas en cada competencia.
La gente se reunía para aplaudir a “Los Titanes del Camino” y vaya que lo eran:
Bastaba verlos en peligrosos descensos, como La Rumorosa en Baja California, donde llegaban a alcanzar velocidades hasta de 130 kilómetros por hora.
De por sí su media alcanzada en terrenos planos, arriba de los 42 kilómetros, ya era de por sí atractiva.
Tardaban un suspiro en pasar frente a los espectadores, que hoy solo pueden seguir las grandes vueltas por la televisión y redes.