Conoce la típica agua del Viernes de Dolores
Antesala de la Semana Santa, el Viernes de Dolores es una tradición apropiada por los guanajuatenses desde hace más de un siglo. Por lo que se acostumbra a colocar altares en honor a la Virgen de Dolores y se ofrece la conocida bebida “Lágrimas de la Virgen”, “Agua de Cuaresma” o incluso, “Agua de Obispo”.
De acuerdo con la tradición católica, la Virgen María lloró lágrimas de sangre ante la pasión y muerte de Jesucristo, su único hijo. El agua que se regala en los altares es de color rojo, parecido al de la sangre, lo que representa las lágrimas derramadas por la virgen.
Para prepararla, necesitarás lo siguiente:
•2 betabeles
•2 plátanos
•½ melón chino
•1 trozo de lechuga
•2 naranjas peladas y picadas
•3 y ½ litros de agua
•Azúcar al gusto
Sigue los siguientes pasos para su preparación:
1. Lavar y pelar los betabeles, picarlos en trozos grandes y cocerlos en 1 1/2 litro de agua hasta que queden suaves. (No tires el agua de cocción).
2. Dejar enfriar el betabel y cortar en pequeños trozos.
3. Desinfecta y corta la lechuga.
4. Lavar, pelar y cortar en trozos pequeños el melón, las naranjas y el plátano.
5. Colocar todo en un recipiente grande y mezclar. Agregar los 2 litros de agua restante, el agua de cocción del betabel y endulzar al gusto.
6. Refrigerar por al menos 3 horas, y ¡A servir!
En algunos municipios también se acostumbra a ofrecer paletas hielo o helado de sabores que representen el color rojo tradicional.
Entre los elementos básicos del altar no puede faltar la imagen de Virgen Dolorosa sobre una mesa adornada con manteles morados o blancos de papel picado. Al frente, las alfombras de yerbas olorosas o aserrín pintado para hacer menos penoso su camino.
Sobre la mesa se coloca un crucifijo, algunas veladoras, las naranjas agrias con banderitas de colores de papel montadas encima, y flores que simbolizan la solidaridad y el consuelo que los fieles brindan a la Virgen.